
Tipos de retenedores dentales que existen
Uno de los tratamientos más populares en nuestra clinica dental en barcelona son los retenedores, estos elementos encargados de evitar que los dientes se muevan después de ser enderezados por la ortodoncia, mejorando la funcionalidad y estética de las piezas dentales.
¿Qué tipos de retenedores hay hoy en día?
Dentro de los tratamientos de ortodoncia, los retenedores cumplen la función de evitar que los dientes se muevan después de un procedimiento de ortodoncia. El proceso puede durar entre cuatro a seis meses, para que los dientes recuperen la posición correcta nuevamente.
Durante este tiempo, los dientes tratarán de volver al lugar original, provocando una recaída y perjudicando todo el procedimiento de ortodoncia realizado. Los retenedores forman parte entonces del tratamiento de ortodoncia para garantizar los resultados.
Actualmente, existen cuatro tipos de retenedores dentales que se utilizan en la odontología, entre los cuales se encuentran los siguientes.
1. Retenedores Hawley
Son retenedores elaborados de alambre plegable y acrílico o plástico. El alambre va por delante de las piezas dentales y el acrílico tiene un diseño que le permite encajar de forma óptima en la boca.
Los retenedores Hawley se consiguen en diversos estilos y colores, lo que permite personalizarlos a tu gusto. También son soportes ajustables, de esta manera el ortodoncista puede “afilar” los dientes después de que los frenos se ajusten.
La principal ventaja de los retenedores Hawley es su característica ajustable, logrando que los dientes se toquen entre sí de forma natural. Tienen una alta durabilidad si se cuidan de forma correcta y son fáciles de limpiar.
2. Retenedores dentales Essix
En los tratamientos de ortodoncia también se utilizan los retenedores Essix, fabricados de plástico transparente moldeado. Son retenedores parecidos al alineador Invisalign, por lo que es el preferido de muchos por ser menos visible que el anterior mencionado.
A pesar de esto, no son los retenedores más usados por los ortodoncistas, ya que su vida útil es más corta que los soportes Hawley. Se comienzan a desgastar después de un par de años, siendo necesario reemplazarlos.
Tampoco permite que los dientes se toquen de forma natural, son difíciles de limpiar y pueden retener líquido en los dientes. La única ventaja a mencionar es que son casi invisibles, por lo que apenas se notan puestos.
3. Retenedores dentales fijos
Se tratan de los soportes que se colocan de forma fija en la dentadura, pegándose en la parte posterior de los dientes, principalmente los seis dientes inferiores delanteros. Por lo general, el ortodoncista puede comenzar con un retenedor fijo y luego pasar a uno Hawley o Essix, después de que pasen seis meses o un año.
Estos retenedores mantienen las piezas dentales más saludables y no están a la vista de las personas. Sin embargo, es complicado utilizar hilo dental en los dientes adheridos y en ocasiones puede cortar o alterar la lengua.
4. Retenedores dentales removibles
Como su nombre lo indica, son retenedores que se pueden retirar con facilidad al momento de comer o cepillarse los dientes, esto hace más sencilla la limpieza dental. También son retenedores más fáciles de obtener y de mantener en buenas condiciones.
Al igual que los anteriores retenedores, cuenta con varias desventajas a considerar, como la posibilidad de extraviarse al retirarlo de la boca, dañarse con facilidad si se dejan tirados, y pueden producir de forma excesiva saliva.
Además, si no se limpian de la manera correcta, pueden proliferar bacterias en los retenedores que luego pasarán a la boca. Es importante usar estos retenedores el tiempo indicado, retirándolos solo al comer o lavarse los dientes, para que los dientes no vuelvan a su posición original.
¿Cómo cuidar los retenedores dentales?
La correcta limpieza de los retenedores, tanto los fijos como los removibles, es importante para alargar su vida útil y para mantenerlos en óptimas condiciones, mientras cumplen su función en el tratamiento de ortodoncia.
Para la limpieza de los retenedores fijos es necesario cepillar los dientes y usar un hilo dental especial, diseñado para dientes con retenedores o puentes, conocido como Super Floss.
El ortodoncista te enseñará a usar de forma correcta este hilo dental especial para garantizar la mejor higiene bucodental. Con esto se evitará la acumulación de bacterias en los dientes y conservará a los retenedores en buen estado por más tiempo.
En el caso de lo retenedores dentales removibles, se deben limpiar de forma similar a la dentadura. Se deben retirar antes de comer para que no se llene de residuos de alimentos y comience a acumular sarro.
Para limpiarlo se puede usar un cepillo de prótesis o de uñas, siendo estos últimos los que tiene cerdas más duras, logrando una limpieza más eficiente. También es necesario usar un habón de manos neutro.
Después de cepillarlos se tiene que secar para evitar la formación de moho. Incluso se recomienda sumergirlos en una pastilla de dentadura cada quince días y durante cuatro horas, para desinfectarlos totalmente.
Otra manera de lavar los retenedores removibles es sumergiéndolos en un vaso de agua y bicarbonato de sodio, en enjuague bucal sin alcohol o en vinagre suave.
A la hora de realizar un tratamiento de ortodoncia, los retenedores cumplen con la función especial de garantizar la posición de los dientes, y así obtener mejores resultados.